sábado, 16 de junio de 2018

A ti, papá




      A ti, en la que hubiera sido la fecha de tu cumpleaños, te quiero dedicar éstas palabras que salen de mi corazón con todos mis sentimientos.

      A esa persona humilde, sencilla, trabajadora al máximo, amante de la familia, por la que luchaste sin descanso y, así, sacar adelante a  tus "cuatro señoritas" a las que  adorabas sin  pedir nada a cambio .

     A ti, que sólo te permitías dejar de trabajar unos escasos días  al año, siempre por las mismas fechas para presenciar unas corridas de toros, algún teatro musical y, eso sí, al Rocío en sus fiestas para adorar a la Santísima Virgen y tomarte unas copas con tu familia a la que supiste transmitir el amor rociero.
      A ti, a esa buena persona amante de la música que acompañaba a su Virgen del Valle en toda la procesión, detrás de Ella, oyendo la música que al cielo te transportaba.
      A ti, que pasaste los últimos veinticinco años de tu existir sin ver ni la luz del sol, sin dejar escapar de tus labios ni una sola queja por esa circunstancia; que te marchaste de ésta vida pidiéndonos perdón a tus hijas y familiares por las molestias que nos hubieras podido dar, sin darte cuenta siquiera, que te merecías todo nuestro trabajo, nuestro respeto y nuestro cariño.

     Estoy segura de que ocuparás un buen lugar en el Paraiso.

         Gracias papá.