Luces que
brillan de forma especial; colores vivos del arco iris de la ilusión, resplandores
que iluminan el existir; jardín florido del alma…: Primavera de la vida. Sentimientos
que comienzan a surgir como brotes hermosos del almendro en flor: Juventud.
Tras la infancia totalmente dependiente y la
adolescencia, a veces conflictiva, intentamos volar por nosotros mismos, mover
las alas tímidamente hacia una libertad deseada… temida… Futuro que se ve amplio en el firmamento; esperanzas de hacer realidad
sueños maravillosos, de situarnos en lo alto de la montaña y ponernos el mundo
por montera.
Deseos de vivir nuevas experiencias; caminos que se abren a nuestros pies
con múltiples posibilidades e incertidumbres a la hora de decidir; decisiones
unas veces acertadas y otras…. no tanto, que nos llevan a equivocaciones, a
poder rectificar a tiempo o a seguir vagando sin destino. Tentaciones que
aparecen y que hay que saber rechazar. Años cruciales para el futuro, de
esfuerzos, de trabajo, de horas de estudio y preparación, de dificultades para
saber compaginar sacrificio y diversión, y saber sacar el máximo provecho de
las dos cosas.
Rebeldía ante la imposición; ganas de disfrutar de la vida intensamente
sin muchas obligaciones, pero con muchos derechos, confianza plena en los
amigos a quienes hacemos partícipes de nuestros secretos más íntimos… Corazones
que laten apresuradamente, como queriéndose salir del pecho, al encontrar el
primer amor que nunca olvidará; presumir de experiencias incipientes; de
parecer mayores en edad y sabiduría, algo que poco a poco iremos consiguiendo
con el paso de los años y con el correr de la primavera que, paulatinamente
(¡qué lentos pasan los meses en esta etapa!), nos aproximan a la madurez, a la
estabilidad, a las decisiones meditadas, a la seguridad en nosotros mismos, a
la tranquilidad, a situarnos en la sociedad según el esfuerzo que hayamos
realizado, a las posibilidades y a la suerte que hayamos tenido desde el
comienzo de nuestro vida, a encontrar el amor más estable, a aprender a
escuchar a los demás
Aproximación a
la serenidad y a la austeridad del ser...
¡¡Hermosa primavera de la vida!!
¡¡Hermosa primavera de la vida!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario