Como mujer, cuando llega esta fecha no me siento muy bien. Me humilla el que en pleno del siglo XXI haya que celebrar un Día de la Mujer, recordando la discriminación de las mujeres con respecto a los hombres.
Es una fecha que se conmemora en muchos países del mundo. Tuvo sus comienzos cuando las mujeres de diversos continentes se unieron para reclamar la justicia, la paz, la igualdad y el desarrollo frente al machismo dominante a lo largo de los siglos. Comienza así una lucha por participar en la sociedad en igualdad con los hombres.
La idea de un Día Internacional de la Mujer surgió en el mundo industrializado. Como consecuencia de la decisión adoptada en Copenhague; este día se celebró por primera vez un 19 de marzo en Alemania, Austria, Dinamarca y Suiza con mítines a los asistieron numerosas personas. Además del derecho al voto y de ocupar cargos públicos, exigieron el derecho al trabajo, a la formación profesional y a la no discriminación laboral.
Desee 1975 se celebra el 8 de marzo, fecha reconocida por la ONU y designada a la reivindicación de nuestros derechos. Pero, si tenemos en cuenta que la la lucha por la igualdad empezó hace tantos años y que , hasta ahora, hemos logrado grandes avances, no podemos olvidar que aún queda mucho camino por recorrer.
Esperemos que algún día se llegue a conseguir esta igualdad en el mundo entero y que no haga falta celebrar un día especial para la mujer.
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